EDITORIAL / Cosillas

Anda España estremecida porque disfruta de su primer permiso carcelario su presidiaria más conocida: la tonadillera Isabel Pantoja, que ayer abrió todos los medios porque va a pasar en casa cuatro días... aunque cada día disfrutan de un regalo semejante decenas de paisanos suyos que no importan a nadie, pero ya se sabe que ni la cárcel es capaz de igualar a todos.

El caso es que ese ambiente de relajo alivia un poco la tensión política propiciada por las últimas elecciones autonómicas y municipales; y se puede atender a otras cosas... como esa llamada de Mariano Rajoy para ilegalizar los pitidos al himno de España en los partidos de fútbol. Con la mayoría absoluta de que dispone en las Cortes Generales, el presidente del Gobierno es capaz de sacar adelante cualquier proyecto de ley (como ha hecho con temas más delicados, como la reforma del aborto o la llamada 'ley Mordaza'), de modo que no necesita llamar a ningún consenso para defender los símbolos de España... salvo que no quiera enfrentarse a las derechas de Cataluña y el País Vasco.

Porque resulta que quienes amparan los pitidos al Rey Felipe VI son los conservadores catalanes y vascos y por eso no hay quien los frene... ¡acabáramos!

De fútbol se habla mucho también en Asturias, donde el Real Oviedo ha vuelto a la elite años después de que Gabino de Lorenzo intentara liquidarlo; y donde el Sporting tiene aún al alcance de su mano subir a Primera División.

De modo que hay que disfrutar del momento mientras los políticos negocian y los presos se entretienen... ya llegarán los tiempos duros.

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