EDITORIAL / Ya de vuelta
'Astures' vuelve hoy a las redes después de un descanso que es tradicional para la gente de su generación; y pocas cosas han cambiado en cuatro días: Europa tiene miedo, España no tiene Gobierno y Asturias sigue sin arreglo... por culpa de las instituciones (pero también de los ciudadanos, que son quienes las eligen y fácilmente se encogen de hombros).
Ayer mismo, se vio en Bruselas una muestra del nuevo fascismo que está creciendo en el seno de Europa y a nadie parece importarle (como ocurrió hace un siglo, lo que ya ha sido condenado hoy por la Historia). La población no ha aprendido la enseñanza de Edmund Burke: "Para que el mal crezca sólo hace falta que la gente de bien mire a otro lado". O sea: que nadie diga nada cuando se vea en Europa el nuevo fascismo.
Para no ser ignorante, hay que saber que el integrismo yihadista no es igual que el Islam, pero para no ser ingenuo se debe aceptar que utiliza su amparo para crecer... Todo viene de los pilares de esa religión: respetar el ramadán, rezar cinco veces al día, ir a La Meca una vez en la vida, ser generoso con el necesitado y combatir al infiel; en este último punto está la madre del cordero... y en la lectura que de él haga cada imán, ya que el Islam no tiene ninguna autoridad común por encima de los intérpretes del 'Corán' (lo que sería el Vaticano, en la Iglesia cristiana).
Volviendo a España, esta semana será decisiva para conocer si puede haber un gobierno alternativo al de Mariano Rajoy o si habrá que repetir las elecciones, como quiere el gallego. En días se reúnen Sánchez e Iglesias (Pedro y Pablo... qué nombres más religiosos, ¡coño!) y habrá que estar atento a la 'química' que salga del encuentro.
Así que ¡feliz vuelta al trabajo! para quien esté de vuelta y para quien lo tenga... que no es todo el mundo.
Ayer mismo, se vio en Bruselas una muestra del nuevo fascismo que está creciendo en el seno de Europa y a nadie parece importarle (como ocurrió hace un siglo, lo que ya ha sido condenado hoy por la Historia). La población no ha aprendido la enseñanza de Edmund Burke: "Para que el mal crezca sólo hace falta que la gente de bien mire a otro lado". O sea: que nadie diga nada cuando se vea en Europa el nuevo fascismo.
Para no ser ignorante, hay que saber que el integrismo yihadista no es igual que el Islam, pero para no ser ingenuo se debe aceptar que utiliza su amparo para crecer... Todo viene de los pilares de esa religión: respetar el ramadán, rezar cinco veces al día, ir a La Meca una vez en la vida, ser generoso con el necesitado y combatir al infiel; en este último punto está la madre del cordero... y en la lectura que de él haga cada imán, ya que el Islam no tiene ninguna autoridad común por encima de los intérpretes del 'Corán' (lo que sería el Vaticano, en la Iglesia cristiana).
Volviendo a España, esta semana será decisiva para conocer si puede haber un gobierno alternativo al de Mariano Rajoy o si habrá que repetir las elecciones, como quiere el gallego. En días se reúnen Sánchez e Iglesias (Pedro y Pablo... qué nombres más religiosos, ¡coño!) y habrá que estar atento a la 'química' que salga del encuentro.
Así que ¡feliz vuelta al trabajo! para quien esté de vuelta y para quien lo tenga... que no es todo el mundo.
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